La canción es el formato musical que me enamora, el lenguaje que me atraviesa, el que cambia mis días, el que me hace algo. Componer canciones me hace decir todo eso que sabía, pero no me había dado cuenta.
Al principio, no sabía que “valía cantar”, no sabía que importaba, que alguien querría escucharlo, que valía la pena hacerlo mucho y cada vez mejor. Me llevó un tiempo ver lo colectivo, la necesidad social primaria del canto.
Hoy canto porque ya no sabría cómo parar. He cantado para festejar, llorar, marchar, pedir, salvar, amar, mostrar, exorcizar, esperar y compartir. Canto con lo que tengo y con lo que no tengo también. Canto suave y ferozmente. Canto esperando otras cosas y festejando lo que ya hay.
Este proyecto solista nace con la idea de repensar lo que llamamos “música infantil” y es una invitación a que niñes y adultes puedan disfrutar música juntes. Tiene 8 composiciones propias y una adaptación de un tema del costarricense “Papa Tun”, y fue posible con el apoyo del programa Mecenazgo del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y la Fundación Itaú. Lo encontrás en plataformas digitales.
En 2010 creamos junto a mi amiga Laura Ledesma el dúo musical Vecina, una propuesta que muches conocieron por los recitales acústicos al aire libre en el barrio porteño de Colegiales a los que llamamos “Vecina en la Vereda”. Grabamos tres discos, hicimos giras por el interior de la Argentina y varios países de Latinoamérica y compartimos escenarios con artistas muy querides.
En 2019 creé Doña Calypsa, el grupo con el que usé voz femenina al traducir al español temas de Harry Belafonte y Walter Gavitt “Segundo” Ferguson. Me acompañaron en esta formación Martín Santiago, Arturo Blas, Ana Richard y Juan Pablo de Mendonca.
En 2005 creé el septeto Dasvidania, un cuarteto vocal con dúo de percusión y bajo. Me acompañaron Luciana Azuaga, Mercedes Moreira y Laura Ledesma en voces, Miguel Ibañez en bajo, y David Fernández y Hernán Gulla en percusión. Con esta formación (la primera con la que estrené composiciones propias) me presenté hasta 2010 en diversos escenarios porteños y del conurbano y grabé mi primer disco, con la dirección artística de Juan Ravioli. Fue grabado en estudios ION y masterizado por Eduardo Bergallo en Puro Mastering.
Entre 2003 y 2007, creamos con mi profesora Lili Rossi el dúo vocal LaRossi & LaNela. Elegimos un repertorio original y ecléctico de canciones de aquí y de allá que abarcó desde “Canciones del tiempo de Maricastaña” (Leda Valladares y María Elena Walsh) y algún que otro canto sefaradí, hasta el “Duetto Buffo Di Due Gatti” de Rossini, folklore y canciones de Liliana Felipe. Durante cinco años tocamos en escenarios porteños y fuimos de gira por Calafate, Argentina.
En 2019 me sumé al colectivo Dale Jarana: un grupo de mujeres feministas con las que estudiamos el son jarocho mexicano. En ciertas fechas, marchamos cantando, con jaranas en mano, interpretando nuestros propios versos alusivos. Hemos estado tocando en vivo en las marchas de ¨Ni una Menos¨ y del ¨8M¨ de 2019 y 2020. Actualmente estamos grabando una versión del son de ¨La guacamaya¨ junto a las voces mexicanas de Anna Arismendez y Stephani Delgado.